5 Tips para un 2022 Eco-Amigable

¿Nuevo año, un nuevo yo? ¿Se sigue hablando de propósitos de año nuevo? Puede que aún estemos a tiempo de hacerlo, pero en lugar de propósitos, creemos que es mejor hacer un plan y ponerlo en marcha. ¿Cuántas veces hemos dicho todos que queremos comer mejor, ser más activos o, tal vez, tener más conciencia ecológica? ¿Se ha cumplido? 

Este año queremos proponerte un estilo de vida más sostenible. Dicho así, puede sonar un poco vago y muy parecido a un propósito de año nuevo, pero veamos 5 pasos que puedes dar desde hoy mismo, hacia un estilo de vida respetuoso con el medio ambiente:

1.aPlanificar con antelación las comidas semanales

Planificar con antelación las comidas de la semana es una práctica habitual que ahorra tiempo, dinero, confusión y esfuerzo. Pero, ¿sabías que esta forma organizada de comer también tiene beneficios cuando se trata de mantener un estilo de vida ecológico? Cuando crees tu plan de comidas, asegúrate de hacer una lista de los ingredientes y las cantidades necesarias para cada comida. Tener un plan de lo que vas a comer a lo largo de la semana te permite recorrer los pasillos de tu supermercado local de manera rápida y metódica. Además, esto reducirá drásticamente el desperdicio de alimentos, así como el consumo de artículos como el exceso de envases de plástico. 

Dependiendo de la cantidad de tiempo y esfuerzo que quieras dedicar a tu plan de comidas, puedes repetir comidas a lo largo de la semana o tener algo nuevo cada día. Cuando hagas la compra, intenta buscar artículos envasados en papel, vidrio u otros materiales que puedan reutilizarse o reciclarse. Si te sientes atascado o no estás seguro de qué comidas crear para tu plan de comidas, Myplate.gov es un buen lugar para empezar.

2. Familiarízate con lo que hay dentro de lo que compras

Consumir alimentos elaborados con ingredientes sostenibles no solo es beneficioso para tu cuerpo, sino también para la Tierra. La sobreproducción de ingredientes -como el aceite de palma- puede contribuir en alto grado a la deforestación a gran escala, la contaminación del aire y del agua y las emisiones de gases de efecto invernadero. Lo mejor es centrarse en alimentos elaborados con ingredientes que se han cosechado de forma responsable. 

Dependiendo de dónde compres, ciertos envases pueden incluso indicarte inicialmente si han sido fabricados para ser respetuosos con el medio ambiente.

3. Reciclar en la cocina

Reciclar es siempre estupendo. Sin embargo, es importante asegurarse de que estás reciclando correctamente. Diferentes estados e incluso diferentes ciudades y distritos tienden a tener diferentes reglas y regulaciones sobre lo que permitirán o no para el reciclaje. Para evitar que te denieguen el reciclaje, lo mejor es repasar lo que tu zona considera aceptable en el contenedor de reciclaje. Si las normas son muy específicas (por ejemplo, las botellas de agua se pueden reciclar, pero no las tapas), puede ser útil imprimir las normas y colocarlas en un lugar visible cerca del espacio donde se separa el reciclaje. Una vez que estés familiarizado con lo que es basura y lo que va al reciclaje, será muy fácil.

4. Lavado de platos en el lavavajillas o a mano

El privilegio de tener un lavavajillas tiende a ser inigualable. Pero, ¿sabías que no tienes que usarlo siempre? Para conservar el agua, es mejor lavar los platos a mano cuando son pocos. La mejor manera de hacerlo es en el fregadero, con un jabón ecológico y asegurándose de que el agua únicamente corre cuando hay que aclarar la vajilla, no mientras se friega. Reservar el lavavajillas para cuando tengas una carga grande y completa de platos no solo te ahorra tiempo y energía, sino también galones de agua.

5. Haz tus conservas de frutas y verduras favoritas en casa.

Los trucos DIY son populares por una razón: ¡funcionan! A menudo, tan bien como si fueras a la tienda a comprar lo mismo. La comida no es una excepción a esta regla. Los productos en escabeche, en lata o en conserva que se compran en la tienda suelen estar hechos con cantidades excesivas de sal y azúcar y vienen en envases que no se pueden reutilizar ni reciclar. ¿La solución? Hazlo tú mismo. Encurtir frutas y verduras en casa es sencillo, fácil y muy adaptable. La mayoría requiere poco más que un tarro, agua, vinagre, especias y la fruta o verdura que elijas. Si quieres disfrutar antes de tus productos encurtidos, también hay formas de "encurtir rápidamente" alimentos.

Si todo esto aún te parece demasiado, recuerda que no tienes que empezar todo de una vez. Al fin y al cabo, cada cambio es importante y seguramente influirá no solo en el estilo de vida de tu familia, sino también en el de tus conexiones más cercanas. 

¡Que el 2022 sea un año feliz, saludable y ecológico!

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